La Inteligencia de Talentos se basa en el proceso de adquisición y análisis de información sobre los empleados actuales y futuros.
Los empresarios utilizan la inteligencia del talento para detectar tendencias en el comportamiento, las competencias y el rendimiento de los trabajadores. Las organizaciones pueden mejorar sus decisiones de contratación y gestión de la mano de obra con el uso de la inteligencia del talento.
Los empleadores recopilan y analizan la inteligencia sobre el talento de diversas formas, entre las que se incluyen las siguientes:
Las empresas lo utilizan para controlar el compromiso y el rendimiento de sus empleados. Gracias a la información generada, se puede localizar a los empleados que necesitan más formación o ayuda.
Toma de decisiones de mayor calidad: La inteligencia del talento permite a las empresas tomar decisiones más informadas y basadas en datos sobre su personal. Las organizaciones encuentran tendencias y patrones importantes que orientan las decisiones relativas a la contratación, el reclutamiento y el desarrollo de los empleados mediante la recopilación y el análisis de una amplia gama de datos sobre las habilidades, el rendimiento y el compromiso de los empleados.
Mejora del desarrollo de los empleados: La inteligencia del talento ayuda a las organizaciones a determinar qué áreas de desarrollo del personal pueden requerir más formación o asistencia. Los empresarios crean estrategias de formación y desarrollo individualizadas para cada empleado utilizando la inteligencia de talentos. El rendimiento de la organización mejora como resultado de ayudar a las organizaciones a aumentar las habilidades y talentos de su personal.
Mayor compromiso de los empleados: Las organizaciones pueden descubrir las causas del bajo compromiso de los empleados con la ayuda de la inteligencia del talento. Ayuda a las organizaciones a crear iniciativas para aumentar el compromiso. El aumento de los niveles de compromiso conlleva numerosas ventajas:
Reducción de riesgos: Las organizaciones pueden detectar posibles áreas de riesgo con la ayuda de la inteligencia del talento. Entre ellas se incluyen las carencias de competencias o la rotación significativa de personal. Las organizaciones reducen la probabilidad de efectos adversos en el rendimiento y la productividad detectando y resolviendo estos problemas.
A la hora de gestionar el talento, las organizaciones pueden beneficiarse del uso de la inteligencia del talento. Proporciona a las empresas un sólido conjunto de herramientas para encontrar perspectivas sin explotar. A menudo, estos conocimientos se traducen en una mejora del rendimiento empresarial.
Como acabamos de mencionar, puede utilizar la inteligencia del talento para recopilar datos y analizar qué motiva (o no) a sus empleados. Esto puede lograrse examinando detenidamente los conocimientos, habilidades y formación que posee su plantilla.
También puede recabar información sobre las personas que contratan sus competidores, los puestos que cubren y las prestaciones que ofrecen.