En RRHH, la planificación de la sucesión es el proceso de preparar a las personas para que en el futuro vacantes apoyen las operaciones corporativas en curso. La planificación de la sucesión es una inversión estratégica a largo plazo que protege tanto a las grandes como a las medianas empresas frente a interrupciones inminentes o vacantes inesperadas. La planificación de la sucesión, que suele durar de uno a tres años, incluye la formación y preparación de las personas para asumir nuevas funciones con confianza y serenidad.
El proceso de planificación tiene como objetivo desarrollar un talento proceso de trabajo de sucesores potenciales que mantendrán el negocio funcionando sin problemas o sin interrupciones significativas cuando se produzcan cambios inevitables de empleados.
Un plan de sucesión puede ser necesario para que una empresa invierta en sus trabajadores, identifique las carencias de competencias que requieren formación y preserve los conocimientos internos de la empresa. El proceso ayuda a encontrar candidatos con las capacidades y aptitudes necesarias para cubrir el puesto vacante.
Con el fin de apoyar la eficacia de las operaciones durante las salidas, traslados o ascensos, los ejecutivos de RRHH forman a personas para cubrir una variedad de vacantes dentro de organización.
Una empresa debe tener siempre a mano líderes capaces en caso de un cambio inesperado, que es el objetivo de la planificación de la sucesión. Si su empresa no se adapta rápidamente cuando una persona clave se marcha o fallece porque no tenía planificada una estrategia de sucesión, es posible que no tenga una segunda oportunidad.
Al fin y al cabo, no se puede predecir cuándo ocurrirá una enfermedad catastrófica, un accidente, una tragedia o una pandemia, pero sí se puede planificar lo que hay que hacer si ocurre.
Es una faceta esencial de la gestión de personas que hace posible que una empresa se desarrolle sin problemas, se prepare para el futuro, promueva la diversidad y la inclusión y reduzca las interrupciones del flujo de trabajo y de los procesos.
Evaluar las posibles carencias de personal y elaborar objetivos y planes a largo plazo para cubrirlas, en particular mediante el desarrollo del liderazgo, son componentes esenciales de una planificación eficaz de la sucesión.
La importancia de la planificación de la sucesión está estrechamente relacionada con sus beneficios. Algunos de los beneficios son los siguientes:
El proceso de planificación de la sucesión de cada empresa es diferente, pero existen normas generales a las que puede adherirse para contribuir al desarrollo de un plan de sucesión satisfactorio para su organización.
Evaluación:
La fase de evaluación de un plan de sucesión incluye;
Evaluación:
La fase de evaluación de un plan de sucesión implica;
Desarrollar:
Captar los conocimientos que las personas tienen antes de abandonar una organización forma parte de la fase de desarrollo de un plan de sucesión, al igual que crear una reserva de talentos que pueda ocupar puestos clave mediante planes de desarrollo profesional.
Una empresa estable puede mantenerse bien preparándose para los cambios inevitables en el lugar de trabajo mediante la planificación de la sucesión. La planificación de la sucesión capacita a las personas, lo que aumenta sus habilidades, su confianza en sí mismas, su motivación y su lealtad. En consecuencia, organización se beneficia de contar con empleados altamente eficaces, informados y comprometidos. El flujo de desarrollo y productividad se refuerza invirtiendo en formación y planificación profesional, lo que también contribuye a crear una cultura de trabajo fuerte y saludable.
Aunque "contratación" y "planificación de la sucesión" se utilizan a veces como sinónimos, no son lo mismo.
La planificación de la sucesión es un proceso estratégico utilizado por las organizaciones para encontrar y desarrollar talentos internos para futuras funciones de liderazgo.
La contratación es el proceso de encontrar y contratar personas para las vacantes disponibles.
Mientras que la contratación es un proceso más inmediato que se concentra en cubrir los puestos disponibles, la planificación de la sucesión es una estrategia a largo plazo que anticipa las demandas futuras.
Además, mientras que la contratación se centra en traer candidatos externos, la planificación de la sucesión se centra en desarrollar el talento interno.
La planificación de la sucesión exige cooperación, apoyo y trabajo por parte de la dirección de organización. Otro requisito es trabajar en todos los departamentos para identificar y cubrir las necesidades de cualificación y, a continuación, comunicar esas carencias a RRHH y a los responsables de contratación.
Los beneficios de la planificación de la sucesión para las empresas son evidentes y sustanciales. El desarrollo de un plan de sucesión favorece el rendimiento de una empresa al fomentar la innovación, aumentar ingresos y atraer a los mejores, además de aportar nuevos puntos de vista y reforzar la cultura del lugar de trabajo. Además, ayuda a ofrecer un remedio proactivo a los problemas de continuidad de la empresa relacionados con las personas.