La colocación dividida es una estrategia de contratación en la que dos o más reclutadores trabajan juntos para cubrir una oferta de empleo.
En lugar de que un único reclutador se encargue de todo el proceso de contratación, los reclutadores se dividen las responsabilidades del trabajo y comparten la comisión obtenida de la colocación.
Por lo general, uno de los reclutadores busca y selecciona a los candidatos, mientras que el otro gestiona la relación con el cliente y negocia la oferta.
Esto permite a ambos responsables de la contratación centrarse en sus puntos fuertes y aumenta las posibilidades de éxito de la colocación.
Las colocaciones divididas pueden realizarse entre reclutadores de la misma agencia o de agencias diferentes. En el caso de agencias diferentes, los reclutadores pueden asociarse e intercambiar órdenes de trabajo para cubrir puestos.
Las colocaciones divididas son habituales en sectores con una gran demanda de talentos especializados, en los que un reclutador puede no tener la red o los conocimientos necesarios para cubrir un pedido de empleo por sí solo.
Una de las principales ventajas de las colocaciones divididas es que amplían la reserva de candidatos a disposición de los responsables de contratación.
Con varios reclutadores trabajando juntos, la búsqueda de candidatos cualificados puede abarcar una gama más amplia de sectores, regiones y conjuntos de aptitudes. Esto aumenta la probabilidad de encontrar al candidato adecuado para el puesto, lo que puede dar lugar a contrataciones más rápidas y clientes más satisfechos.
Las colocaciones divididas también aumentan la eficiencia, ya que cada reclutador puede centrarse en sus puntos fuertes.
Por ejemplo, si un reclutador destaca en la búsqueda de candidatos y el otro tiene buenas relaciones con los clientes, cada uno puede centrarse en sus respectivas tareas, lo que permite un proceso más ágil.
Esto puede agilizar las colocaciones, mejorar la calidad de los candidatos y aumentar la satisfacción de los clientes.
Las colocaciones divididas también pueden ayudar a reducir el riesgo y los costes asociados a una mala contratación. Con varios reclutadores trabajando en la misma orden de trabajo, hay menos riesgo de que un candidato se escape o se pase por alto.
Además, compartir los gastos de contratación, como los anuncios de empleo y la publicidad, puede ayudar a reducir los costes generales asociados a la cobertura de un puesto de trabajo.
Por último, las colocaciones divididas pueden aumentar ingresos para los reclutadores. Trabajando juntos, los reclutadores pueden acceder a pedidos de trabajo más grandes y ganar una comisión más alta. Esto puede conducir a un aumento de ingresos y al crecimiento del negocio de la selección de personal.
Este método puede ser una estrategia valiosa para los reclutadores que buscan ampliar su reserva de candidatos, mejorar la eficiencia, reducir riesgos y costes y aumentar ingresos.
Los reclutadores que trabajan juntos pueden ofrecer un mayor nivel de servicio a sus clientes y establecer asociaciones que pueden conducir al éxito a largo plazo.