Un día libre retribuido que cada empleado puede elegir cuándo utilizar se conoce como vacaciones flotantes. Un festivo flotante es aquel que se desplaza a la fecha preferida por el empleado cada año, de ahí su nombre. Las vacaciones flotantes suelen concederse además de las vacaciones pagadas normales que la mayoría de las empresas ofrecen como recompensa.
Las empresas optan por ofrecer vacaciones flotantes con más frecuencia porque aumentan la moral de los empleados y atraen a los mejores talentos.
Las vacaciones flotantes pueden satisfacer diversas necesidades e intereses. Algunos empleados las utilizan para tomarse el día libre por una festividad importante para ellos, pero que no forma parte de las fiestas pagadas de la empresa, como una celebración religiosa o cultural. Algunas personas deciden irse de vacaciones flotantes en un día memorable, como su cumpleaños o la boda de un amigo. Otros pueden optar por utilizar sus vacaciones flotantes para cualquier cosa, como ir a pescar al lago o simplemente pasar un día tranquilo en casa relajándose.
Sin embargo, algunas empresas limitan la capacidad de los empleados para elegir sus vacaciones flotantes a los acontecimientos y fiestas asociados a su cultura, religión o gobierno.
La práctica de conceder vacaciones flotantes al personal tiene varias ventajas. En primer lugar, da a los trabajadores la libertad de utilizar sus vacaciones como mejor les parezca, ya sea para viajar, pasar tiempo con sus seres queridos o atender asuntos personales. Esto permite a los trabajadores una mayor flexibilidad y control sobre su tiempo, lo que puede ser crucial sobre todo para los que tienen familia. Los empleados también pueden evitar ausentarse en momentos de mucho trabajo o en periodos de gran demanda de viajes. Además, los días de baja por enfermedad y los días de vacaciones no utilizados pueden cubrirse con las vacaciones flotantes. Por último, como permiten a los trabajadores tomarse tiempo libre sin agotar sus días de vacaciones, pueden ser una herramienta útil para retener a los trabajadores.
La implantación de las vacaciones flotantes puede hacerse de varias maneras. Una estrategia consiste en asignar únicamente una cantidad fija de días de vacaciones pagadas que los trabajadores puedan utilizar como consideren oportuno. Otra posibilidad es que las empresas permitan a los trabajadores elegir cualquier día de vacaciones retribuidas dentro de un plazo predeterminado, como una semana o un mes.
A la hora de introducir las vacaciones flotantes, los empresarios deben tener en cuenta varios factores: cuenta. Deben decidir, por ejemplo, cuántos días ofrecer y si los días deben ser consecutivos o espaciados en el tiempo.