Como su nombre indica, la contratación flexible de personal consiste en sustituir a algunos de los empleados fijos y permanentes de organización por personal o mano de obra. Es un método que ayuda a cubrir puestos vacantes mediante la contratación de trabajadores temporales, a tiempo parcial o independientes para un puesto concreto.
Empleados alquilados: En este caso, la agencia paga al empleado en lugar de al empresario, que alquila una parte del personal de la agencia.
Empresas de trabajo temporal: Los empresarios contratan a trabajadores a través de empresas de trabajo temporal por poco tiempo. En lugar de ser las organizaciones las que los proporcionan, el empresario se encarga de pagar a los empleados.
Trabajadores contratados: En este caso, los trabajadores están empleados por un subcontratista que presta sus servicios a un cliente o empresa diferente. El subcontratista es responsable de pagar los salarios de los trabajadores porque son sus empleados. Los trabajadores vuelven al subcontratista cuando termina la tarea, quien los envía a la siguiente ubicación de un cliente diferente.
Como es sencillo dejarles marchar una vez realizado el trabajo previsto, a los empresarios les resulta más cómodo contratar a algunos empleados como parte de su modelo de personal flexible.
De este modo, pueden elegir al mejor candidato para el puesto sin tener que operar dentro de los límites de un marco legal que les obliga a tratar a su personal como empleados de la empresa y, por tanto, con derecho a una serie de ventajas.
Esta elección le da el mando sobre los trabajadores. Debido a sus rígidas estructuras laborales, los competidores son vulnerables a los altibajos económicos, pero la empresa puede reforzar su posición en el mercado y ser más competitiva.
Los empresarios también están encantados de incorporar nuevos empleados, ya que han empezado a reconocer las muchas ventajas que ofrece la idea. Como los trabajadores están contentos, la empresa puede expandirse y prosperar porque son más competentes y están más centrados en el trabajo.
Siempre existe la posibilidad de que un trabajador valioso se marche para ocupar un puesto en una empresa permanente y con mejores oportunidades.
Uno de los inconvenientes es que los trabajadores perciben un salario inferior al de sus compañeros en puestos fijos, que reciben una compensación mayor.
Sin embargo, la contratación flexible entraña ciertas dificultades. Encontrar profesionales cualificados que estén dispuestos a trabajar de forma temporal o contratada puede ser todo un reto. Gestionar una plantilla de trabajadores a tiempo parcial, temporales y contratados puede ser más complicado que gestionar una plantilla de empleados a tiempo completo, lo que supone otra dificultad.
En general, la contratación flexible de personal es una estrategia empresarial que puede proporcionar a las empresas una serie de ventajas, como la reducción de los gastos laborales, el aumento de la retención de los trabajadores y horarios de trabajo más adaptables. El modelo tiene importantes limitaciones, pero pueden resolverse con una preparación y aplicación adecuadas.