La retención de empleados es la capacidad de una empresa para mantener a sus trabajadores contentos e interesados en su trabajo y evitar que se marchen para explorar otras alternativas. Debido a la evolución de las normas sociales y culturales y al hecho de que los distintos empleados tienen a veces expectativas muy diferentes en cuanto a ventajas y experiencias en el lugar de trabajo, la retención de empleados sigue siendo un reto para muchas empresas. La gestión de la retención de los empleados incluye el uso de una serie de herramientas y estrategias para mejorar los flujos de trabajo y cultivar una mano de obra bien informada, feliz, exitosa y diversa.
Retener a los empleados ayuda a la empresa a mantenerse sana y con éxito. Contratar y formar nuevo personal lleva mucho tiempo, esfuerzo y dinero, y la rotación puede perjudicar el rendimiento de una empresa. La rotación de personal conlleva numerosos problemas, como gastos elevados, pérdida de conocimientos y baja productividad.
Los empleados de larga duración de una empresa aportan mucho valor a la corporación. Conocen a fondo la misión de la empresa y son expertos en realizar las tareas que se les asignan. Además, tienen todas las habilidades necesarias para cumplir con éxito vacantes de forma regular.
Para una empresa, mantener un personal competente y fiable es económicamente lucrativo. El proceso de contratación de nuevos empleados consume tiempo y dinero. Las empresas pueden invertir más dinero en otras áreas de sus operaciones al reducirse los costes de rotación de personal.
El personal con antigüedad está bien formado y tiene confianza en sí mismo para desempeñar sus tareas cotidianas. Saben entregar sus tareas a tiempo y han establecido excelentes canales de comunicación con sus directivos y compañeros. Los recién contratados deben recibir formación y disponen de tiempo para adaptarse a las exigencias del nuevo lugar de trabajo, lo que reduce temporalmente la productividad del equipo.
Todas las empresas quieren aumentar sus índices de retención. Las empresas deben adaptar sus estrategias de gestión para retener el talento en una cultura en la que las personas son cada vez más móviles.
Determine cuáles son las funciones con mayor rotación de personal y quiénes son los que más rinden.
Parece lógico que las empresas obtengan los mayores beneficios centrándose en el problema más importante para su organización.
Las empresas pueden concentrar sus esfuerzos en los mayores gastos y tener un mayor impacto identificando las funciones con los índices de rotación más elevados.
Aumentar el rendimiento y la lealtad de los empleados
Ni que decir tiene que si las empresas quieren que sus empleados permanezcan con ellas, deben compensarles adecuadamente. Por otro lado, es crucial recompensar su lealtad y sus logros, además de ofrecerles planes de remuneración competitivos. Recompensar a los empleados de forma justa, coherente y diferente en función de su rendimiento y resultados garantizará el máximo refuerzo.
Ofrecer feedback, desarrollo y formación
Los empleados cualificados siempre quieren más. Quieren sentirse parte de una empresa, poder lograr más, mejorar sus habilidades y ser mejores. Ofrezca a los empleados la formación y la ayuda que necesitan para triunfar en la empresa.
La duración del examen debe decidirse antes de determinar el índice de retención. La mayoría de las empresas utilizan un año para medir su índice de retención.
Total de trabajadores al final del periodo especificado ÷ (Número de trabajadores al principio del periodo especificado más+ contrataciones) X 100
Pongamos un ejemplo. Una empresa tenía 30 empleados el 1 de enero de 2022. Contrató a 5 nuevos empleados durante el año. El 31 de diciembre de 2022, su equipo tenía 22 empleados.
Su índice de rotación se calcula del siguiente modo 22 ÷ (30 + 5) × 100. La empresa, por tanto, tiene un índice de retención del 62,8%.
Las empresas que no reconocen el valor de la retención del personal suelen encontrarse con una serie de resultados empresariales negativos, entre los que se incluyen:
Contratar a un nuevo empleado cuesta dinero. Las empresas pueden perder miles de libras debido a la interrupción de las operaciones y al impacto de los gastos de contratación.
Los clientes pueden quejarse con más frecuencia,
y su confianza en organización puede empezar a erosionarse si las empresas cuentan con personal menos cualificado para gestionar sus consultas. Es importante recordar que la satisfacción del cliente y la retención del personal están positivamente correlacionadas. Las empresas que valoran sus relaciones con los clientes tienen más probabilidades de ofrecer experiencias excelentes a sus empleados.
Más empleados asumen las responsabilidades de antiguos compañeros cuando la plantilla es más reducida. Un nuevo empleado contratado también necesitará tiempo y formación para aclimatarse a los requisitos de su puesto. Este grado de agitación puede extenderse a toda la empresa, sobre todo si muchas divisiones se desprenden simultáneamente de personal.
Los empresarios podrían asistir a un cambio cultural sustancial cuando las relaciones profesionales entre compañeros de trabajo se debiliten. Mientras esperan a que la siguiente persona presente su dimisión, es posible que los empleados ya no puedan funcionar con éxito como un equipo. Además, es posible que los compañeros más veteranos no hayan mantenido contacto con los distintos departamentos, lo que aumenta los malentendidos, la insatisfacción y la inestabilidad cultural.
La retención de empleados se define como la capacidad de una organización para evitar la rotación de personal, es decir, el número de personas que abandonan su puesto de trabajo en un periodo determinado, voluntaria o involuntariamente.
Para retener mejor a los empleados es necesario contar con trayectorias profesionales claras, una remuneración competitiva y el desarrollo de culturas positivas en el lugar de trabajo. Estos tres factores son un buen punto de partida para retener al personal.