Un modelo de política de empresa para medidas disciplinarias es una herramienta esencial para que las organizaciones establezcan expectativas y consecuencias claras para el comportamiento de los empleados. Proporciona una hoja de ruta para gestionar las cuestiones disciplinarias de forma objetiva y coherente. Mediante la aplicación de una política de este tipo, las empresas pueden fomentar un entorno de trabajo productivo y respetuoso al tiempo que protegen sus intereses y el bienestar de sus empleados.
La mala conducta de los empleados puede perjudicarles tanto a ellos como a organización. Por eso, para prevenir y tratar este tipo de comportamientos, las empresas crean políticas de acción disciplinaria. Estas políticas establecen los pasos y las consecuencias de las distintas infracciones. Proporcionan un marco para que los directivos y los profesionales de RRHH gestionen las situaciones disciplinarias de forma coherente y justa.
Esta política sirve para establecer directrices y procedimientos para la adopción de medidas disciplinarias en [Nombre de la empresa]. Su objetivo es mantener un entorno de trabajo productivo y armonioso, describiendo las consecuencias de la mala conducta de los empleados y proporcionando un proceso justo y coherente para abordar las cuestiones disciplinarias.
Esta política se aplica a todos los empleados, incluidos los trabajadores a tiempo completo, a tiempo parcial, temporales y contratados, independientemente de su puesto o nivel dentro de organización.
Elementos políticos:
1. Conducta:
1. Los empleados deben cumplir el código de conducta de la empresa, que incluye, entre otros, la profesionalidad, el respeto, la honradez, el trabajo en equipo y el cumplimiento de las leyes y reglamentos.
2. La infracción del código de conducta puede dar lugar a medidas disciplinarias, en función de la gravedad y la frecuencia de la falta.
2. Tipos de faltas:
1. Los siguientes son ejemplos de conductas indebidas que pueden dar lugar a medidas disciplinarias:
1. Mal rendimiento o incumplimiento de los requisitos del puesto.
2. 2. Problemas de asistencia, incluidas ausencias excesivas, retrasos o permisos no autorizados.
3. 3. Violación de las políticas o procedimientos de la empresa.
4. 4. Insubordinación o negativa a seguir instrucciones razonables.
5. Acoso, discriminación o cualquier otra forma de conducta indebida que cree un entorno laboral hostil.
6. 6. Robo, fraude u otro comportamiento deshonesto.
7. Abuso de sustancias o estar bajo los efectos del alcohol o las drogas durante las horas de trabajo.
8. Violación de la confidencialidad o de los derechos de propiedad intelectual.
9. Cualquier otro comportamiento que perturbe el trabajo o comprometa la reputación de la empresa.
3. Proceso disciplinario:
1. 1. Investigación: Al recibir una denuncia o tener conocimiento de una supuesta conducta indebida, la empresa llevará a cabo una investigación exhaustiva e imparcial para reunir todos los hechos y pruebas pertinentes.
2. Comunicación: El empleado será notificado de la investigación y de las acusaciones en su contra. Tendrá la oportunidad de dar su versión de los hechos y presentar pruebas o testigos en su defensa.
3. 3. Reunión disciplinaria: Si la investigación determina que se justifica la adopción de medidas disciplinarias, se invitará al empleado a una reunión disciplinaria. Durante esta reunión, se informará al empleado de la decisión, los motivos de la misma y la medida disciplinaria propuesta.
4. documentación: Todas las medidas disciplinarias, incluidas las advertencias verbales, las advertencias escritas, las suspensiones o los despidos, se documentarán y conservarán en el expediente personal del empleado.
5. 5. Procedimiento de recurso: Los empleados tienen derecho a apelar las medidas disciplinarias. El proceso de apelación, incluidos los plazos y las autoridades designadas, se describirá claramente y se comunicará a los empleados.
4. Disciplina progresiva:
1. La empresa sigue un enfoque disciplinario progresivo, que generalmente consiste en advertencias verbales, advertencias escritas, suspensiones y despidos. La gravedad y la frecuencia de la mala conducta determinarán el nivel apropiado de acción disciplinaria.
2. No obstante, la empresa se reserva el derecho de saltarse los pasos progresivos y adoptar inmediatamente medidas disciplinarias severas, incluido el despido, en casos de mala conducta grave, como violencia, robo o actividades ilegales.
5. Confidencialidad y privacidad:
1. Todas las medidas disciplinarias se tratarán de forma confidencial y en función de la necesidad de conocerlas. Sólo las personas directamente implicadas en la investigación y el proceso disciplinario tendrán acceso a la información pertinente.
2. Se respetará la intimidad personal durante todo el proceso disciplinario y sólo se compartirá la información necesaria para llevar a cabo la investigación y aplicar las medidas disciplinarias.
6. Represalias:
1. Las represalias contra un empleado que inicie o participe en una queja o investigación están estrictamente prohibidas. Todo empleado que sea sorprendido en un comportamiento de represalia será objeto de medidas disciplinarias.
7. Formación y comunicación:
1. La empresa proporcionará formación periódica a los empleados para garantizar el conocimiento y la comprensión de esta política de medidas disciplinarias.
2. Esta política se comunicará a todos los empleados a través del manual del empleado, la intranet o cualquier otro medio adecuado.
La acción disciplinaria se refiere a las medidas adoptadas por la empresa para abordar y corregir la mala conducta de los empleados. Su objetivo es fomentar un comportamiento adecuado, disuadir de futuras faltas y mantener un entorno de trabajo positivo. Las medidas disciplinarias pueden incluir advertencias verbales, advertencias escritas, suspensiones y, en casos graves, el despido.
El incumplimiento de esta política puede dar lugar a medidas disciplinarias, incluido el despido.
[Nombre de la empresa] se compromete a garantizar la imparcialidad y el debido proceso en todos los asuntos disciplinarios, al tiempo que defiende los valores de la empresa y mantiene un lugar de trabajo seguro y productivo para todos los empleados.
Disponer de una plantilla de política de empresa en materia de medidas disciplinarias es crucial para cualquier organización. Ayuda a mantener un entorno de trabajo productivo y profesional al definir las expectativas y las consecuencias. Esta política garantiza la coherencia, la equidad y la responsabilidad a la hora de abordar la mala conducta de los empleados. También proporciona un marco para la acción correctiva, contribuyendo al éxito general y a la eficacia de la empresa. Con una política disciplinaria bien definida, las organizaciones pueden resolver eficazmente los problemas, fomentar el crecimiento de los empleados y mantener sus valores y normas.