La gestión de las cuestiones disciplinarias es un asunto importante en RRHH. Se trata de mantener el buen funcionamiento del lugar de trabajo y asegurarse de que todo el mundo está de acuerdo. Los responsables de RR.HH. tienen que entender de qué se trata la acción disciplinaria, cómo hacerlo bien y qué significa tanto para los empleados como para la empresa.
¿Qué es una acción disciplinaria?
Cuando alguien en el trabajo no respeta las normas o su rendimiento no está a la altura, se toman medidas disciplinarias. Esto puede significar cualquier cosa, desde una amable charla hasta la expulsión.
¿Por qué lo hacemos?
La acción disciplinaria no consiste sólo en regañar a alguien. Se trata de dejar claro lo que no está bien y darle la oportunidad de corregirlo. También se trata de mantener un lugar de trabajo seguro y respetuoso para todos.
Diferentes formas de abordarlo
- El chat: A veces, basta una charla rápida para solucionar las cosas. Un simple aviso amistoso para empujar a alguien en la dirección correcta.
- La advertencia: Si las cosas no mejoran, es hora de ponerse serio con una advertencia por escrito. En ella se explica el problema y lo que puede ocurrir si no mejora.
- Tiempo muerto: En los casos más graves, puede ser necesaria una suspensión. Esto significa que la persona se ausenta del trabajo durante un tiempo, quizá con o sin sueldo, dependiendo de la gravedad del asunto.
- Descenso: si alguien no da la talla, es posible que se le cambie de puesto, algo parecido a un descenso de categoría.
- El adiós: Cuando las cosas no tienen arreglo, puede que haya llegado el momento de decir adiós para siempre.
Cómo lo hacemos
- A fondo: Antes de actuar, es importante entender realmente lo que está pasando. Eso significa investigar el asunto y reunir todos los datos.
- El rastro en papel: Todo debe quedar por escrito: lo que ha ocurrido, lo que se ha dicho y lo que sigue.
- Háblalo: Las conversaciones claras y sinceras con la persona implicada son fundamentales. Se trata de que todo el mundo sepa a qué atenerse.
- Control: Cuando todo está dicho y hecho, es importante vigilar que las cosas mejoren y ofrecer apoyo si es necesario.
Unirlo todo
Por lo tanto, las medidas disciplinarias no consisten sólo en regañar a la gente, sino en mantener el buen funcionamiento del lugar de trabajo y asegurarse de que todo el mundo recibe un trato justo. Con normas claras y manejando las cosas con cuidado, RRHH puede mantener el lugar de trabajo como un sitio positivo y respetuoso donde todo el mundo sabe lo que se espera de él.