La baja por duelo es una parte muy importante de cómo cuidamos a nuestros empleados cuando pasan por un momento difícil tras perder a alguien cercano. Como alguien que se ocupa de temas de RR.HH., es crucial saber qué significa este tipo de permiso y cómo asegurarnos de que funciona bien en nuestra empresa. Este artículo pretende ofrecerte un resumen sencillo sobre la baja por duelo y por qué es tan importante para apoyar a nuestros empleados en duelo.
El permiso por duelo, también llamado permiso por compasión o permiso por funeral, es el tiempo libre que concedemos a los empleados que han perdido a un ser querido. Su finalidad es darles tiempo para llorar la pérdida, organizar el funeral y ocuparse de otros asuntos personales relacionados con la pérdida.
La idea de este permiso es permitir a los empleados llorar la pérdida de alguien cercano sin preocuparse por el trabajo. Perder a un ser querido es duro, y la gente necesita tiempo para asimilar sus sentimientos y ocuparse de las cosas prácticas. Concederles este permiso demuestra que comprendemos por lo que están pasando y les apoyamos en un momento difícil.
Ofrecer un permiso por duelo es muy importante para el bienestar de nuestros empleados y para crear un lugar de trabajo solidario. Cuando las personas pueden tomarse el tiempo que necesitan para hacer el duelo adecuadamente, suelen volver al trabajo sintiéndose mejor y más preparadas para concentrarse. Además, demuestra que nos preocupamos por los miembros de nuestro equipo más allá de su rendimiento laboral.
A quién se concede la baja por duelo y durante cuánto tiempo puede variar en función de las normas de nuestra empresa y de la ley. Suele ser para familiares cercanos, como padres, cónyuges, hijos, hermanos o abuelos. A veces también se amplía a otros familiares o amigos íntimos.
En cuanto a la duración, también puede variar. Algunas compañías tienen un número fijo de días, mientras que otras son más flexibles. Queremos asegurarnos de que la gente tenga tiempo suficiente para asistir al funeral, ocuparse del papeleo y empezar a curarse.
Cuando alguien necesita un permiso por duelo, solemos pedir algún tipo de prueba, como un certificado de defunción o una esquela. Así nos aseguramos de que todo es legal y justo para todos.
También esperamos que los empleados nos comuniquen lo antes posible si necesitan este permiso. Así podemos ajustar horarios y cargas de trabajo y mostrar respeto por lo que están pasando.
La cuantía de la indemnización por duelo puede variar en función de nuestras políticas y de la legislación. Algunas personas pueden recibir la paga completa, mientras que otras pueden recibir menos o nada en absoluto. También puede ser independiente de otros tipos de permisos, como las vacaciones o la baja por enfermedad.
En resumen, el permiso por duelo consiste en dar a nuestros empleados el tiempo y el espacio que necesitan para afrontar la pérdida de un ser querido. Proporcionar este tipo de apoyo es muy importante para crear un lugar de trabajo solidario en el que las personas se sientan valoradas y comprendidas. Como profesionales de RRHH, depende de nosotros asegurarnos de que nuestras políticas de baja por duelo sean claras y justas para todos, de modo que podamos seguir fomentando un entorno de trabajo compasivo.